Título: El secreto de la orquídea
Autor: Lucinda Riley
Editorial: Debolsillo
Páginas: 560
Buenos días algodoneros!
Hoy os traigo la reseña de una de mis autoras de cabecera. Los que me sigáis en redes sociales estaréis cansados de verme recomendar todos los libros de esta autora. Y es que cuantos más leo de ella, más me gusta. Esta ha sido la última incorporación a mi pequeña colección de libros de esta autora. Todo ello gracias a mi queridísima amiga invisible Adictas Romántica.
Para los que queráis leer algo de esta autora por primera vez, este es el libro ideal. Es una novela autoconclusiva en la que podréis descubrir la esencia de la pluma de la autora. Una de las cosas que más me gusta de estos libros es la manera que tiene la autora de hacernos viajar en el espacio/tiempo sin a penas darnos cuenta.
Siempre que leo un libro de Lucinda Riley, no puedo evitar pensar en la serie de Downton Abbey y es que esas grandes mansiones, las familias aristocráticas, los bailes de sociedad, los matrimonios por interés, las alianzas sociales... todo ello se puede encontrar concentrado en una novela como esta. No os quiero contar absolutamente nada de la trama, ya que la sinopsis creo que es más que suficiente para ir abriendo boca y poder descubrir si más o menos la trama nos puede llamar la atención.
Esta es de esas obras dignas de ser descubiertas poco a poco. Estás cargada de intrigas familiares que nos traerán de cabeza en más de un capítulo y que, a pesar de estar acostumbrada a leer este tipo de libros, tengo que decir que me ha sorprendido y mucho. Sobre todo con la historia de Julia. Me ha encantado la protagonista, tanto del presente como del pasado y eso ha hecho que pudiera conectar aún más con la autora.
En resumen, si ya habéis leído algo de la autora no podéis dejar de descubrir cual es El secreto de la orquídea y si os queréis iniciar con la novela contemporánea con saltos en el tiempo, sin duda, este es vuestro libro.
De niña, Julia Forrester pasaba horas en el invernadero de Wharton Park haciendo compañía a su abuelo, el jardinero de la hermosa mansión aristocrática. Años después, tras perder lo que más sentido daba a su vida, Julia busca consuelo en ese escenario que marcó su infancia. Pero Wharton Park es una sombra de sus días pasados y Kit Crawford, el último heredero de una gran familia, se ve obligado a ponerla en venta. Entre los objetos subastados se encuentra la acuarela de una rara orquídea, procedente de Tailandia, que pronto despertará en ella recuerdos enterrados. Poco después, un sorprendente hallazgo en las dependencias de los criados suscita nuevas preguntas que solo su abuela, antigua doncella de la finca, podrá responder.
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