Puro

Título: Puro

Autor: Jennifer L. Armentrout

Editorial: Kiwi

Páginas: 391

Buenas tardes algodoneros!!

Seguimos viento en popa y a toda vela con las lecturas en cuarentena. La verdad es que no pensé que fuera a estar tan ocupada ene sta época y estoy leyendo menos de los esperado y deseado, pero aún así, me estoy quitando de encima unos cuanto pendientes, como es por ejemplo la saga de Covenant. En entradas anteriores del blog os podéis encontrar con las reseñas de los dos libros anteriores de la saga, los correspondientes las 0.5 Daimon y el 1 Mestiza. Por una vez en la vida estoy logrando leerlos en orden, así que hoy ha llegado el turno al número 2 de la saga, Puro.

Este segundo libro sigue la linea temporal del anterior. Una cosa que me está gustando mucho es que el libro anterior empieza justo en el mismo punto que termina el siguiente y eso hace que quieras leerlos complemente seguidos como si fuera un solo libro enooooooorme.

Tengo que reconocer desde ya que yo soy muy Team Seth pero es que he cometido un erro garrafal... antes de empezar la saga de Covenant me leí el primer libro del spin-off de esta saga...pero es que pensaba que era una saga independiente y al otra saga que versa sobre Seth pues le cogí demasiado cariño. Pero que sepáis que mi relación con él es la típica de amor-odio. En realidad, todo esto viene a que Seth en este libro cobra un papel importantísimo al lado de Alexandría, no os voy a desvelar mucho ya que la sinopsis cuenta ya lo esencial. Pero digamos que se convierte en su calmante, el que permite una cierta estabilidad, un poco de control en todo ese caos que se ha convertido su vida.

Ese caos, muy al pesar de Alejandría, seguirá reinando en todo el Covenant ya que los Daiomons vuelven a la taque y no van a cesar en su empeño de hacerse con el control de todo. Eso va a desencadenar una serie de acontecimientos en los que todos se verán involucrados. Caleb, Aiden, Marcus, Seth...no podrá evitar que el destino que tienen marcado para ellos se cumpla.

¿A qué os ha entrado curiosidad? Los dioses son muy caprichosos así que vais a tener que leer el libro si queréis saber lo que pasa.

Está la necesidad.

Y luego está el Destino.

Estar destinada a convertirse en un enchufe sobrenatural no es precisamente algo genial, especialmente cuando la «otra mitad» de Alexandria la sigue allá donde va. Y que, además, Seth aparezca en su sala de entrenamiento, al salir de las clases y también en la puerta —o ventana— de su dormitorio, definitivamente no es nada genial.

Aunque su conexión tiene algunos beneficios, como alejar las pesadillas que envuelven lo ocurrido con su madre, no tiene efecto alguno sobre los sentimientos prohibidos que tiene Álex por el puro Aiden. Ni sobre qué va a hacer —y sacrificar— él por ella.

Cuando los daimons se infiltran en los Covenants y atacan a los estudiantes, los dioses envían a las furias, diosas menores con la función de erradicar cualquier amenaza para los Covenants y el resto de los dioses, incluyendo al Apollyon y a Álex. Y si eso y las hordas de monstruos chupadores de éter no fueran suficiente, una amenaza misteriosa parece dispuesta a hacer cualquier cosa por neutralizar a Seth, incluso si eso supone forzar a Álex a la servidumbre o matarla.